viernes, 30 de enero de 2009

Los Nietos de Moyano


El lustro kirchnerista se caracterizó por una vuelta a escena de la dinámica de los convenios colectivos y de la negociación sindical. Es a mí entender éste el punto más valioso del conjunto de logros que no se le pueden negar al actual gobierno.

En un viejo post decía también que las causas de la inflación actual (que se había ralentado en los meses postreros del año pasado, y que ahora volvió a trepar sin causa atribuible al crecimiento) tienen que ver con las presiones empresariales sobre la cadena de comercialización (maximizar ganancias, bah), porque no existen razones objetivas que tengan que ver con el costo laboral.

Ahora el escenario de crisis mundial es la excusa del lloriqueo: “¡Imposible hablar de aumentos!”. En realidad, la crisis obliga a tomar recaudos para sostener el nivel de actividad. Cristina ha tomado medidas correctas en ese sentido. Y los empresarios están sosteniendo una tasa de ganancias envidiable a pesar de la merma productiva.

Moyano anunció que no habrá pisos ni techos para las paritarias salariales, el “pujante empresariado” habla de aumento 0. Se viene un año caliente, y si no se logran aumentos salariales razonablemente proporcionales al nivel del costo de vida, el desempleo estará a la vuelta de la esquina. Los hechos también marcan que el gobierno ha mostrado lucidez en el manejo del conflicto capital-trabajo, en buena sintonía con la CGT (casos GM-SMATA, Paraná Metal-UOM). La alianza CGT-Gobierno es clave. Para las partes, pero por sobre todo, para los trabajadores.

Mientras tanto, la autoproclamada “líder de la oposición” sale a hacer “docencia blanca” en los barrios, para liberar a los pobres: “Si seguimos así, a nuestros nietos los van a gobernar los nietos de Moyano”. Silencio para que el auditorio asimile. El discurso gorila llevado al extremo, brutalmente explicitado, como pocas veces en la historia de nuestro país.

Para los que tienen dudas (todavía): en octubre, la boleta del PJ, COMPLETA.